Lean esto: “Alumno sacó un arma en plena clase y amenazó a la maestra”. Otra vez la misma historia. ¿Qué pasa con la educación en este país, vamos para atrás viejo, siempre lo mismo? Esta vez va denserio. Estoy podrido de ver amedrentados y corriendo despavoridos por los patios de los colegios a los profesores y maestros. Es NO DA MÁS. Ya es hora de que el Gobierno deje de invertir en pavadas y tome el toro por las astas. Para eso propongo que desde el Ministerio de Educación repartan armas de diferente calibre para los educadores, según los escalafones. Según la escala que he diagramado ad honorem; a los reemplazantes de turno les correspondería un revólver calibre 22; a las maestras de grado, una UZI acompañada de la reglamentaria 9mm; en tanto, los profesores de secundaria (en atención que los educandos son más grandecitos) recibirán un fusil de asalto calibre 7,62 x 39 de bala expansiva y un AK – 47 de 508 mm, ideal para repetición; por supuesto, el kit viene acompañado de una reglamentaria 9mm. Finalmente, los directores de establecimientos educativos, podrán optar entre una calibre 50mm autodesplazable o un lanzallamas a base de napalm; incluyendo ambas opciones una Smith & Wesson calibre 45.
2 comentarios:
Como nadie hizo comentario todavía, voy a hacerme un autocomentario, ahi va: "uh loco que copado, que grosso sos che, que buen blog, ¿viste que buen blo?uh vieja, que bien la paso, páguenme sin trabajar, denme plata, give me money, demen money, demen money, demen money, lalala"
vendo granadas y regalo una para que le tiren al del comentario anterior...
Publicar un comentario